Los inviernos ya no son lo que eran, los colores clásicos de la temporada como el negro, gris, azul oscuro o suela se corrieron para darle paso a los nuevos tonos que le ponen onda al frío. Te contamos cuáles son y cómo usarlos!

  • Blanco: El color por excelencia del verano ya no es sólo usable en esa época, ahora también se viste en invierno. El ‘total white’ o el dúo crudo-blanco pueden ser un gran aliado, elegante y sofisticado. Recordá que este color tiene una contra, visualmente tiende a agrandar, por eso tené en cuenta las zonas en donde lo llevas o buscá el corte perfecto para tu tipo de cuerpo.
  • Amarillo: Alegre y divertido, perfecto para acompañar con denim, bordeaux y negro. Si no te animas llevarlo en un abrigo, elegí un pañuelo o camisa (que se luzca el cuello encima del sweater).
  • Rojo: Siempre fue una opción para las más pasionales. Ahora está muy presente. Va perfecto para pieles claras y cabellos rubios o azabaches. Llevalo por ejemplo en chaquetas de cuero.
  • Azules: La gama de este tono se agranda mucho más, desde los delicados pasteles hasta los oscuros más varoniles. Combinalo con blancos, crudos, grises o negros.
  • Bordeaux: Súper elegante, se ha convertido en un básico. Combinalo con naranjas, rojos, rosas o simplemente con tonos neutros. Al ser un color oscuro es ideal para disimular aquellas zonas que queremos pasar desapercibidas.

También se ponen en juego los naranjas, magentas, verdes…Justamente la consigna es esa “jugar”, animate a más, correte de las estructuras y poné tu creatividad en marcha. La libertad en el vestir es la protagonista.

maxresdefault azul_fall_2014_1-a burdeos_fall_2014_1-a rojo_fall_2014_1-a magenta_fall_2014_1-a naranja_fall_2014_1-a verde_fall_2014_1-a